Originalmente el salpicón es un plato de carne o pescado que se sirve frío con papas y una vinagreta. Actualmente hay una gran variedad de este tipo de recetas, incluso hay salpicón con frutas.
Salpicón de judías blancas
Salpicón de judías blancas, ingredientes:
1 bote de judías blancas cocidas.
1 pepino, 1 pimiento rojo.
1 cebolla, perejil fresco.
Sal, aceite de oliva virgen.
Pimienta molida. Vinagre de vino blanco.
2 huevos duros.
1 lata de maíz dulce.
1 remolacha cocida.
1 cucharadita de café de comino en polvo.
1 pepino, 1 pimiento rojo.
1 cebolla, perejil fresco.
Sal, aceite de oliva virgen.
Pimienta molida. Vinagre de vino blanco.
2 huevos duros.
1 lata de maíz dulce.
1 remolacha cocida.
1 cucharadita de café de comino en polvo.
Salpicón de judías blancas, elaboración:
2.- Escurrimos las judías y el maíz. Cortamos en dados pequeños la cebolla, el pimiento rojo, el pepino y la remolacha. Picamo el perejil. En un bol o ensaladera ponemos todos los ingrediente y los mezclamos bien. Salpimentamos al gusto. Rociamos con el aceite de oliva y el vinagre. Ponemos el salpicón de judías en una ensaladera y servimos con unos huevos duros cortados en gajos. Espolvoreamos un poco de comino por encima. Guardamos en la nevera el salpicón de judías hasta el momento de servir.
1.- Ponemos a cocer los huevos en agua hirviendo y sal durante 9 minutos. Los pasamos por agua fría y le quitamos la cáscara. Pelamos el pepino y la cebolla.
2.- Escurrimos las judías y el maíz. Cortamos en dados pequeños la cebolla, el pimiento rojo, el pepino y la remolacha. Picamo el perejil. En un bol o ensaladera ponemos todos los ingrediente y los mezclamos bien. Salpimentamos al gusto. Rociamos con el aceite de oliva y el vinagre. Ponemos el salpicón de judías en una ensaladera y servimos con unos huevos duros cortados en gajos. Espolvoreamos un poco de comino por encima. Guardamos en la nevera el salpicón de judías hasta el momento de servir.
Consejo: Lo puedes servir como plato de acompañamiento para carne o pescado.
También lo puedes servir como tapa o entrante y disfrutar con una cerveza fría.
Es un plato que puedes hacer con antelación y siempre sabrá mejor que recién hecho.
Ideal para llevar en tupper a la playa o un día de campo.
En casa nos gusta este tipo de receta servido con una papas sancochadas con un poco de aceite de oliva por encima.
¡Buen provecho!
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